Tesla en Madrid: polémica por pruebas sin autorización

El sistema FSD choca con la normativa española

Tesla ha llevado su software de conducción autónoma a Madrid como parte de un programa de pruebas europeo. Lo hizo sin contar con las autorizaciones necesarias, según confirmaron tanto el Ayuntamiento de Madrid como la Dirección General de Tráfico (DGT). La compañía difundió un vídeo donde un Model 3 recorre lugares icónicos como la Puerta de Alcalá y Cibeles bajo supervisión, pero sin aprobación oficial.

El Ayuntamiento y la DGT reaccionan con firmeza

Borja Carabante, delegado municipal, denunció que el vehículo no tenía autorización para circular en modo autónomo. La DGT ha solicitado explicaciones a Tesla. Ambos organismos recuerdan que este tipo de pruebas requiere una doble autorización: un informe favorable del consistorio y una resolución por parte de Tráfico. Sin ello, la operación es considerada ilegal, por más que haya un operador a bordo.

Europa, entre el avance tecnológico y los límites legales

Tesla afirma estar trabajando con los reguladores europeos para legalizar el uso de su FSD Supervisada. El sistema ya se utiliza en EE. UU., México, Canadá y China. Sin embargo, la legislación europea aún impone barreras estrictas, sobre todo en entornos urbanos donde la movilidad conectada y autónoma todavía está sujeta a múltiples normativas nacionales y locales.

Precedentes legales y un futuro aún por definir

Otros fabricantes, como Renault, han realizado pruebas similares en París o Barcelona, pero siempre con los permisos en regla. La diferencia clave es que Tesla decidió avanzar sin la autorización previa. Aunque la compañía defiende que su sistema mejora la seguridad vial y reduce accidentes, el caso de Madrid expone la tensión entre innovación y regulación en la nueva movilidad urbana.