BBVA enfrenta riesgos de capital si lanza segunda opa

Jefferies alerta sobre posible déficit de hasta €5.000 millones

La mejora del 10% en la oferta de adquisición de BBVA por Banco Sabadell no convence a todos los analistas. Un informe de Jefferies advierte que, en caso de que BBVA reduzca el umbral mínimo de aceptación del 50% al 30%, podría verse obligado a lanzar una segunda opa obligatoria, esta vez en efectivo o con alternativa en efectivo. Dicha operación supondría un consumo de capital adicional que podría generar un déficit de entre 1.000 y 5.000 millones de euros.

La firma considera que esta mejora se sitúa en el límite inferior de las expectativas del mercado y será difícil que satisfaga al consejo de administración de Sabadell, que ya rechazó la primera oferta. Si la tasa de aceptación alcanza el 100%, el impacto en la ratio de capital CET1 se reduciría a 21 puntos básicos, frente a los 34 anteriores. En el escenario de una aceptación del 50%, el impacto sería de 41 puntos básicos, mejorando frente a los 49 puntos del planteamiento previo.

Opción de una segunda opa obligatoria en efectivo

Jefferies advierte que si BBVA decide modificar el umbral mínimo al 30%, se vería forzado a lanzar una segunda opa por el capital restante de Sabadell. Esta nueva oferta debería realizarse a un precio “equitativo” acordado con la CNMV. El informe señala que una adquisición de entre el 50% y el 70% del capital implicaría una mayor presión sobre la ratio de CET1, que podría caer por debajo del objetivo del 12%.

Como medida paliativa, BBVA podría cancelar el programa de recompra de acciones de 1.000 millones de euros aprobado en abril de 2025, aún no ejecutado y ya deducido del capital. Esto podría facilitar una segunda oferta en efectivo si el nivel de aceptación de la actual se acerca al 50%.

Barclays también ve riesgos pero destaca oportunidad

Por su parte, Barclays publicó un análisis en el que considera que la oferta revisada podría ser atractiva para accionistas institucionales, ya que Sabadell cotiza por encima de su precio objetivo de 3,20 euros. Los analistas del banco británico destacan que la operación se produce en un contexto positivo para el sector bancario y podría actuar como catalizador para BBVA en los próximos seis meses.

Sin embargo, Barclays coincide con Jefferies en que una aceptación cercana al 30% forzaría una segunda opa obligatoria, aumentando el riesgo de mercado y comprometiendo la disciplina de capital de BBVA. Aun así, estiman que la entidad no eliminará la condición del 50% como requisito para ejecutar la operación, aunque podría mostrarse flexible si la aceptación se queda ligeramente por debajo.