EEUU crece 3,8% y deja atrás el riesgo de recesión

El PIB sorprende con una revisión al alza

La economía de Estados Unidos creció un 3,8% en el segundo trimestre de 2025 frente al mismo periodo del año anterior, según la tercera revisión de la Oficina de Análisis Económico (BEA). Este dato supera ampliamente el 3,3% previsto por los analistas y descarta una recesión técnica, tras la contracción del 0,6% registrada entre enero y marzo.

La revisión confirma el sólido comportamiento del Producto Interno Bruto, que también creció un 0,9% frente al trimestre anterior. Es la tercera revisión consecutiva al alza, tras una primera estimación del 3% y una segunda de 3,3%. El impulso se explica principalmente por el aumento del gasto de consumo y una caída de las importaciones.

Una recuperación en medio de una tregua comercial

El repunte económico coincide con un periodo de menor tensión comercial. Tras el Día de la Liberación, el presidente Donald Trump pausó los aranceles hasta principios de agosto y firmó acuerdos con Londres y Pekín. Esta tregua habría aliviado las presiones sobre los importadores, lo que redujo las compras externas y fortaleció el dato del PIB.

Según la BEA, la disminución de las importaciones —que restan en el cálculo del PIB— y el incremento del consumo interno explican gran parte del avance económico. La revisión de cinco décimas al alza responde principalmente a una actualización positiva del gasto de los hogares.

Consumo fuerte, pero riesgos persistentes

Pese a la sorpresa positiva, algunos economistas advierten que el crecimiento podría moderarse en la segunda mitad del año. Argumentan que la caída de importaciones difícilmente se repetirá y que los riesgos derivados de la política monetaria y los nuevos aranceles seguirán pesando sobre la economía.

Aun así, el consumo privado se mantiene resiliente, aunque con menor dinamismo que en trimestres anteriores. El gasto de los consumidores sigue siendo un pilar clave para el crecimiento económico, en un entorno marcado por tipos de interés elevados y un mercado laboral que comienza a mostrar señales de enfriamiento.

Proyecciones moderadas para 2025 y 2026

La OCDE estima que la economía estadounidense crecerá un 1,8% este año y un 1,5% en 2026, por debajo del 2,8% registrado en 2024. La desaceleración se atribuye a condiciones financieras más restrictivas, menor impulso del consumo y efectos negativos de nuevas barreras comerciales impulsadas por la administración Trump.

Además, se prevé que la inflación se mantenga por encima del objetivo del 2% de la Reserva Federal incluso en 2026, complicando el panorama para futuras decisiones de política monetaria. A pesar de estos desafíos, los datos del segundo trimestre confirman que la mayor economía del mundo mantiene un ritmo de crecimiento sólido.