Gortázar señala presiones de consolidación pero apuesta por el crecimiento orgánico
En plena resaca por la opa fallida del BBVA sobre el Sabadell, el consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, reconoció este viernes que existe una presión de consolidación bancaria en varios países de Europa, incluida España. Sin embargo, defendió el papel de la banca mediana, afirmando que “no está condenada a desaparecer” y que su continuidad dependerá de las decisiones estratégicas de cada entidad.
Gortázar señaló que la buena marcha económica y del sector no obliga a ninguna entidad a buscar operaciones corporativas de forma inmediata. En su opinión, las fusiones deben responder a una visión de largo plazo centrada en ganar escala y eficiencia, no a una necesidad urgente del mercado.
Sinergias limitadas fuera de la península ibérica
El directivo situó la fallida operación entre BBVA y Sabadell dentro de un contexto europeo de consolidación, citando intentos similares en Italia, Alemania y Portugal. Aun así, advirtió que las ofertas no solicitadas han tenido escaso éxito y que cada operación conlleva dificultades propias. “No conducen al éxito automáticamente”, remarcó.
Gortázar descartó que CaixaBank participe en nuevas fusiones, al considerar que ya tiene la escala necesaria tras la integración con Bankia en 2021. “Tenemos una posición envidiable”, aseguró, apuntando que su estrategia se basa en el crecimiento orgánico en España y Portugal. Fuera de estos mercados, dijo no encontrar las sinergias de costes necesarias ni un marco regulatorio homogéneo en Europa que justifique nuevas adquisiciones.
Advertencia sobre el mercado hipotecario
Sobre el debate en torno a las hipotecas, Gortázar reconoció que CaixaBank ha perdido ligeramente cuota de mercado —unos 10 puntos básicos— frente a entidades más agresivas en precios. Aunque evitó calificar el mercado de “irracional”, como han hecho sus pares en Bankinter, Santander y BBVA, sí cuestionó la lógica de que los tipos hipotecarios en España estén muy por debajo de la media europea.
“Los costes hipotecarios son los más bajos de la eurozona. Un 2,5% a tipo fijo, por debajo de la deuda pública a largo plazo. La media europea está en el 3,2%”, explicó, destacando el alto nivel de competencia en el mercado español.
Descarta una burbuja inmobiliaria pero advierte sobre la oferta
Preguntado por una posible burbuja inmobiliaria, Gortázar la descartó citando el bajo nivel de apalancamiento en España, que se sitúa 30 puntos por debajo del promedio europeo. “Difícilmente con estos niveles se están sembrando las bases de una burbuja”, dijo. No obstante, reconoció que el acceso a la vivienda sigue siendo un problema debido al alza de precios, que atribuyó a la falta de oferta.

